El grupo de los «NINIs»:
Según cifras del Injuv, corresponde al 11% de quienes tienen entre 15 y 29 años, sobre todo de los grupos socioeconómicos bajos; un 87% son mujeres y más de la mitad tiene hijos.
Por Tania Herrera
Jugar a la pelota y juntarse con un amigo a escuchar música en el parque La Bandera de San Ramón, son algunas de sus actividades diarias. Hace tres meses que Alexis (19) -quien prefiere omitir su apellido- desertó del liceo, donde cursaba tercero medio. «No ponía atención porque me aburría mucho. Dormía en clases o escuchaba música», cuenta.
Hace dos años, Alexis -el menor de tres hermanos y habitante de San Bernardo-, fue expulsado de un primer colegio por mala conducta. Pero en esta ocasión, la decisión de dejar el segundo establecimiento al que asistía fue propia. «No me gustaba que me mandaran. Los estudios no sirven de nada. Todo lo que he aprendido me lo ha enseñado en la casa mi papá».
El informe «Education at a Glance 2014» de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), mostró que esta no es una realidad aislada. De acuerdo a la investigación, el porcentaje de jóvenes entre 15 y 29 años que en 2011 no estudiaban ni trabajaban alcanzó el 22,3%, la sexta mayor cifra entre los 34 países miembros de la OCDE.
Esta población es la que la literatura ha bautizado como «NINIs», jóvenes que ni estudian ni trabajan. Este indicador, según el informe, es «mejor que la tasa de desempleo para mostrar la dificultad de los jóvenes para conseguir trabajo, ya que incluye no solo los que no pueden conseguir uno (desempleados), sino también los que están desalentados y no están buscando activamente (inactivos)».
Según Andreas Schleicher, director de Educación y Habilidades de la OCDE, en Chile, a diferencia de la mayoría de los países, el grueso de la población de NINIs es inactiva: 17% versus el 8% promedio de los países de la OCDE (ver recuadro).
Daniela Peñaloza (21), de la Cisterna, terminó la enseñanza media. Ingresó a trabajar, pero a los cuatro meses se enteró que estaba embarazada. La joven cuenta que no ha podido trabajar desde que nació su hijo, Agustín, hace 1 año y 9 meses, ya que un poco después del nacimiento, a su madre le diagnosticaron cáncer, un linfoma de Hodgkin. «Tengo que estar con Agustín y además cuidar a mi mamá. No la puedo dejar sola», dice Daniela.
El fenómeno se expresa de manera distinta según género y estrato socioeconómico. Según la Séptima Encuesta Nacional de la Juventud del INJUV, realizada en 2012, el grupo de los NINI representa el 11% de los jóvenes de 15 a 29 años, unas 485 mil personas. De estas, el 87% son mujeres y 13% hombres, y el 68% tiene hijos.
Nicolás Preuss, Director Nacional del INJUV, explica que la proporción de mujeres en esta situación se explica por su dedicación al cuidado de los hijos y a las labores domésticas. «Generalmente se trata de embarazos tempranos, a causa de sus escasos conocimientos sobre el tema al iniciar su vida sexual», dice Preuss, quien agrega que la tasa de embarazo no deseado es mayor en los estratos socioeconómicos bajos.
Según el mismo estudio, 57,3% del total de los NINIs pertenece al estrato bajo, mientras que el 39,2% a los sectores medios y el 3,6% al alto. Otro dato importante es que 38% de ellos presenta educación secundaria incompleta.
Una de las barreras con las que se encuentran los jóvenes en esta situación son los requerimientos de educación y capacitación, explica Macarena Cea, Subdirectora de Investigación Aplicada del Centro de Políticas Públicas UC. «El principal desafío está en mejorar la oferta programática para que los cursos realmente sean útiles y atractivos para los jóvenes», dice Cea, y agrega que una buena iniciativa es el programa de capacitaciones +Capaz, enfocado a 150 mil jóvenes en esa situación.
Otro de los factores psicosociales que incide en la inactividad de los jóvenes es la desesperanza aprendida, explica Leandro Sepúlveda, docente del Centro de Investigación y Desarrollo de la Educación, CIDE. «Se trata de una mala experiencia escolar que les entrega pocos incentivos. Los jóvenes sienten que no vale la pena hacer el esfuerzo».
Los inactivos
Los NINIs que ni siquiera buscan empleo están en mayor riesgo de exclusión social, opina Andreas Schleicher, miembro de la OCDE.
«La inactividad puede estar relacionada con habitar áreas donde no abunden los referentes, los casos de éxito, las oportunidades, y donde no pocas veces confluyen la inseguridad, la marginación e incluso la desesperanza», escribió el investigador Slaven Razmilic, del Centro de Estudios Públicos, en una columna publicada hace pocos días en El Mercurio.