En la madrugada de ayer gobierno y CUT acordaron un reajuste de 6%, que fue rechazado por la Anef. Los funcionarios del Estado convocaron a paro, movilización que seguiría hoy.
Por Nicolle Peña.
Por 73 votos a favor, 21 en contra y una abstención, la Cámara de Diputados aprobó ayer el reajuste de 6% acordado entre el gobierno y la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), para los trabajadores del sector público.
En la sesión, que incluso debió ser suspendida, quedaron de manifiesto las diferencias entre los legisladores -la DC pedía elevar a 6,5% el guarismo-, e incluso hubo propuestas para que la Presidenta, sus ministros y los parlamentarios recibieran un reajuste menor, lo que fue rechazado en la sala.
La génesis
A las cuatro de la madrugada de ayer el gobierno había logrado sellar el acuerdo que, además, incluía el pago de bonos y asignaciones que involucran un gasto fiscal sobre US$ 1.700 millones($ 1 billón) para 2015, según el informe financiero del proyecto de ley. El año pasado ese gasto para 2014 alcanzó los US$ 1.300 millones ($ 784 mil millones).
Del acuerdo gobierno-CUT resolvió marginarse la Agrupación Nacional de Empleados Fiscales (Anef) -que inició una paralización de actividades que continúa hoy-, la Confederación Nacional de Trabajadores de la Salud y los funcionarios municipales, quienes consideraban que se debía reajustar por inflación pasada.
Por ello, durante el día las tres organizaciones que no suscribieron el acuerdo se desplegaron en la Cámara para insistir en la demanda de un alza de entre 10% y 12% nominal (5% y 7% real).
La petición fue acogida por parte de la bancada DC (ver nota secundaria), que impulsó conversaciones incluso con la UDI para obtener votos contra la iniciativa. La defensa del gobierno fue asumida durante la tarde por la ministra del Trabajo, Javiera Blanco, debido a que el titular de Hacienda, Alberto Arenas, se abocó a la tramitación final del Presupuesto en la sala del Senado.
A las críticas de la DC se sumaron las del diputado del PPD, Tucapel Jiménez, quien aseguró que el gobierno tenía la oportunidad para ser coherente con su afán por “defender la igualdad”. Como contraparte, su compañero de partido, Pepe Auth, llamó a la unidad y coherencia del bloque con las propuestas del gobierno.
Otros, como el diputado PS Manuel Monsalve, señalaron que esperan que reformas como la que comprometió el Ejecutivo para regular la negociación colectiva del sector público, faciliten el escenario futuro de incrementos salariales.
“Si este reajuste hubiera sido enviado por el gobierno de Piñera, me gustaría saber si también hubiera contado con el apoyo de los mismos diputados de la Nueva Mayoría que lo están respaldando hoy”, criticó el diputado independiente Gabriel Boric.
El diputado UDI Ernesto Silva dijo que “el reajuste es mediocre, que es propio de un gobierno mediocre. Es un reflejo de lo que los gobiernos pueden hacer”.
Según economistas, la cifra propuesta por Hacienda está por sobre lo aconsejable, considerando las actuales cifras de inflación y la proyección para 2015.
“No debería haber superado el 5%”, dijo Cecilia Cifuentes, de LyD. Coincidió Patricio Rojas, de Rojas y Asociados: “Es una señal bastante mala. En general, la idea que hemos tenido en el último tiempo es que el reajuste se hace en función de la inflación futura, por lo que un alza de 6% cuando la inflación que se espera hacia el 2015 debiese estar en torno a 3% o algo menos de 3%; implica un reajuste real importante”.