Ricardo Mewes, titular de la CNC, hace un duro balance de la iniciativa del Gobierno:
El dirigente afirma que los nueve titulares del proyecto del Ejecutivo no apuntan a generar mejores empleos y que las demandas del mundo empresarial, como la adaptabilidad laboral, no han sido priorizadas.
Por Mariana Penaforte.
«Me preocupa todo lo que está pasando en materia laboral hoy», dice el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Ricardo Mewes. El dirigente gremial se refiere tanto al proyecto de ley que ingresará el Gobierno el próximo lunes 29 al Congreso -al cual prefiere llamar «reforma sindical» – y otras iniciativas que actualmente se tramitan y avanzan en las distintas cámaras.
Mewes señala que temas como titularidad sindical y el fin del reemplazo en huelga afectarán directamente al comercio y que los nueve titulares que el Gobierno ha definido para la reforma «no apuntan en la dirección correcta», que es generar más y mejores empleos.
-¿Cómo impactará al comercio la reforma laboral?
-Tal como está planteada es una reforma sindical, está hecha a la medida para el fortalecimiento de los sindicatos. Nos preocupan varios aspectos de los que están incorporados: la titularidad sindical, el no reemplazo en huelga. Todo lo que tiene que ver con que de repente estamos quitando las atribuciones de la libertad de las personas de pertenecer o no pertenecer a una entidad sindical, por ejemplo. Estamos quitándole facultad a los empleadores para disponer de sus bienes, y eso es apropiación.
-Pero el Gobierno dice que la cancha está dispareja….
-Perdón, qué significa que la cancha esté dispareja cuando (hay gente que) es capaz de parar ilegalmente faenas y amedrentar a trabajadores de otros sectores para que no entren a trabajar (…) Se ven solamente los beneficios a los sindicatos, pero cuando paran una faena o algún servicio mínimo, no hay ninguna sanción. Nos estamos acostumbrando a que en este país no pase nada a la gente que incumple la ley.
¿Emparejar la cancha entre el trabajador y el empleador? Bueno, no somos socios, partamos de esa base. Los trabajadores son colaboradores nuestros y van a recibir los beneficios justos, que correspondan y que además la empresa los pueda sostener en el tiempo, porque también tenemos que preocuparnos de cuidar a la empresa.
La agenda laboral está demonizando la relación entre los trabajadores y los empleadores y eso no es así. Es mucho más fluida de lo que uno cree. Lo que pasa es que los acuerdos, que son los que mayoritariamente se dan, no salen en ninguna parte.
-¿Si se implementan los nueve titulares del Gobierno, qué pasaría con el mercado laboral?
-Se va a ver afectado, porque las empresas siempre se van a ajustar, siempre van a buscar los mejores mecanismos para ser más eficientes. Las grandes empresas en particular obedecen a sus accionistas y los accionistas quieren tener buenos resultados.
-¿Pero cree que tendrá un efecto negativo en la economía?
-Sí, porque va a haber pérdidas de empleo. Los empleadores se ajustan, y se ajustan cuando tienen mucha rigidez, cuando los costos son más altos. Empiezan a buscar tecnología y a innovar.
– ¿Le preocupan otros proyectos en materia laboral?
-Me preocupa todo lo que está pasando en materia laboral hoy día. La ministra Blanco tiene esos nueve puntos. Cuando nosotros planteamos el tema de capacitación, de capital humano y certificación, nos dijo que esto va a ir por otra vía. Pero, ¿por otra vía? Eso debiera ser prioritario.
-¿Cómo ha sido la relación que usted ha tenido con la ministra Javiera Blanco y el ministro Alberto Arenas en ese proceso?
-Tengo la mejor relación con la ministra del Trabajo, no así con el ministro de Hacienda con quien no tenemos relación. Nosotros hemos pedido varias veces reunión él, pero no hemos sido recibidos.
«La agenda laboral de alguna manera está demonizando la relación entre los trabajadores y los empleadores y eso no es así».
«Tengo la mejor relación con la ministra del Trabajo, no así con el ministro de Hacienda, con quien no tenemos relación. Hemos pedido varias veces reunión con él, pero no hemos sido recibidos».
«¿Emparejar la cancha entre el trabajador y el empleador? No somos socios, partamos de esa base. Los trabajadores son colaboradores nuestros y van a recibir los beneficios justos y que correspondan».
Propuesta de la CNC apunta a la adaptabilidad
La CNC le entregó, la semana pasada, a la ministra Javiera Blanco y su asesor Roberto Godoy, un documento con medidas de adaptabilidad laboral principalmente enfocado en las pymes.
Entre las propuestas están sugerencias de adaptabilidad horaria, de remuneraciones, de vigencia de contratos, entre otras.
Se plantea:
En determinadas épocas del año, como las vacaciones, las partes debieran pactar libremente una jornada mayor de trabajo, como pasa en otras ciudades del mundo.
Revisar el sistema de gratificación para que existan más posibilidades para las pymes, con el fin de que puedan fijar un monto de participación de los trabajadores y que, además, sea variable de acuerdo al tamaño de la empresa y de las utilidades.
Permitir la adaptabilidad de los contratos a plazo, en cuanto a posibilitar la renovación por más de dos veces cuando las necesidades de una pyme requieran la extensión de los servicios temporales que realiza el trabajador. Ejemplo: reemplazo por embarazo y por enfermedad.
Revisar el sistema de indemnización por año de servicio, por medio de la rebaja de los 11 años legales a un número inferior e incrementando la cotización por concepto de seguro de cesantía.
En caso de dificultades económicas de la firma, establecer una figura legal que permita al trabajador mantener su empleo, sin perjuicio de ser reasignado a otras funciones o reducir su horario.