Comisión de Trabajo de la Cámara iniciará hoy análisis de indicaciones. También plantean cambios en definición de servicios mínimos.
Por Nicolle Peña.
Pasado el mediodía de ayer envió el gobierno a la Comisión de Trabajo de la Cámara Baja las indicaciones a la reforma laboral. Finalmente, y tal como se anticipó, la autoridad propuso cambios a más de 70 artículos.
Entre ellos, destaca la reducción del período de vacancia de la ley. El proyecto original estipulaba que entraría en vigencia desde el primer día del décimo tercer mes posterior a su publicación en el Diario Oficial. Ahora, a través de las indicaciones, el gobierno resolvió que eso ocurrirá a partir del séptimo mes.
Lautaro Carmona (PC), diputado que preside la comisión de Trabajo, adelantó que la votación comenzará hoy con “todos los artículos que no recibieron indicaciones”. Luego de ello, iniciará el análisis de las indicaciones. “Como probablemente habrá más de una indicación por artículo, si son parecidas, trataremos de construir una redacción común”, explicó. A la sesión asistirán los ministros de Hacienda, Alberto Arenas, y del Trabajo, Javiera Blanco.
Principales cambios
Gran parte de las indicaciones del Ejecutivo responden a las inquietudes planteadas por los parlamentarios oficialistas en las últimas semanas. Un ejemplo de ello son los ajustes propuestos a la definición de servicios mínimos que deben cubrir en la empresa los sindicatos en una huelga.
El nuevo texto precisa que éstos se deben entender como las operaciones “estrictamente necesarias” para evitar un daño “grave” al funcionamiento de una compañía, y establece que su calificación “podrá considerar el tamaño de la empresa”, y ya no necesariamente las características del servicio que presta. Adicionalmente, estipula que éstos se deben definir antes del inicio de la negociación colectiva.
“La novedad de fondo es que se deja explícito que la huelga va a prevalecer siempre, porque las indicaciones dicen que la obligación del sindicato de dar servicios mínimos no puede afectar el derecho a huelga”, opina Fernando Villalobos, abogado de Porzio, Ríos, García y Asociados.
El especialista añade que las indicaciones quitan exigencias a los sindicatos -como la obligación de comparecer ante un ministro de fe al elegir a los delegados- que a su juicio estaban destinadas a evitar abusos con el fuero. En la misma línea, especifica que de aprobarse las modificaciones, el dirigente sindical ya no estará expuesto a sanciones como la pérdida del fuero si incurre en una conducta violenta.
De acuerdo al gobierno, estos ajustes buscan simplificar el procedimiento de negociación colectiva. Con ese espíritu, se repone la normativa vigente, señalando que si la votación de una huelga no obtiene quórum, se entiende que los trabajadores aceptan la última oferta. El proyecto original, en cambio, establecía que si no se alcanzaba el quórum, las partes debían seguir negociando. Eso obligaba a ir a una mediación forzosa, instancia que también fue eliminada.
En cuanto al fuero, las indicaciones mantienen la norma actual -lo que implica eliminar la propuesta contenida en el proyecto que establecía un aviso o reserva previa- y excluye las nuevas causales para el cese del fuero sindical, como renuncia al cargo y al sindicato.
Sobre las facultades de la Dirección del Trabajo, se eliminan: la audiencia de asistencia técnica para concordar entrega de información para la negociación colectiva, el derecho a solicitar reuniones directas ante el organismo y la facultad de proponer cláusulas en los procedimientos de mediación obligatoria. Para esto último, se reincorporó el texto de la norma de los buenos oficios actualmente vigente.
Repone federaciones
Pero eso no fue todo. Ante la presión de los parlamentarios oficialistas para avanzar en la negociación ramal, el gobierno accedió a incluir un nuevo título en el proyecto: la negociación por federaciones o confederaciones.
De esta manera, repuso la actual norma legal que posibilita -con carácter voluntario- que federaciones y confederaciones puedan negociar colectivamente, de forma reglada, si cuentan con el acuerdo de las empresas involucradas.
Arturo Martínez, secretario ejecutivo de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), señaló que eso no los deja conforme, ya que sólo mantiene el estado actual de la legislación. “Hay federaciones con sindicatos de distintos rubros. Eso no es lo que queremos. Queremos negociación por rama, sector u oficio”, enfatizó. Tras conocer el documento, la CUT se reunió ayer para definir una postura frente a los cambios al proyecto.