«Reinsertar a las empresas» del sector en su entorno, será la primera tarea del dirigente.
Por Nicolás Durante.
Patricio Crespo fue elegido presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), por un segundo período. Y será lo que él denominó la “reinserción social” de los empresarios en su entorno, una de las principales tareas que llevará adelante.
Acompañan a Crespo en la mesa directiva por el periodo 2015-2017 Recaredo Ossa en la primera vicepresidencia y María Gracia Cariola, como segunda vicepresidenta. El resto del directorio, de 13 miembros en total, quedó compuesto por Miguel Allamand (Subsole); Ricardo Ariztía Tagle; José Miguel Stegmeier (Socabío); Jose Antonio Galilea (ex ministro de Agricultura, agricultor de la Novena Región); María Inés Figari (Presidenta de la Sociedad Agrícola del Norte); César Barros (ex presidente ejecutivo de La Polar y ex director de la SNA) y por los directores gremiales Horacio Carrasco (Fedeleche); Andrés Rodríguez (Chilean Walnut Commission); Juan Enrique Hoffmann (Saval- Valdivia) y Eduardo Silva (Corporación Chilena del Vino).
PRIORIDADES
“Crecimos muy rápido. Este país se desbordó en el consumo y en la ostentación”, dijo Crespo, en su primer discurso como líder reelegido. “Esta crisis que estamos pasando, de credibilidad, teníamos que vivirla, tarde o temprano. Tuvimos que hacer empresa, crear trabajo, pero se nos olvidó nuestro entorno, y que los límites no terminan en los deslindes de las plantaciones, sino que hay que preocuparse de la relación con los vecinos, con las autoridades”, explicó.
Sobre lo que calificó como “grave crisis de confianza”, en particular, sostuvo que todos los actores deben sentarse y ponerse de acuerdo sobre cómo va a funcionar la relación entre la política y el dinero. “Lo más fácil es ir a golpear la puerta de una empresa, pero deben ser los propios ciudadanos también los que financien a sus propios representantes”.
También habló sobre la reforma laboral y pidió excluir al agro de la legislación que está en discusión y crear un estatuto especial, por la naturaleza de la actividad. “A nosotros con una huelga se nos pudre todo. Hay que tener flexibilidad”, esbozó ante la atenta mirada de los socios del gremio.
Sobre la reforma del Código de Aguas, Crespo pidió “mayor seriedad” en la propuesta del Ejecutivo, ya que desde su punto de vista, “la única manera de hacer el cambio es expropiando y pagando el valor comercial de los derechos de agua ya adquiridos”. Precisó que ya hicieron ver este punto a las autoridades y habría una apertura a cambiar su posición.
Finalmente, dijo que libraran “todas las batallas” para defender a los agricultores de La Araucanía y mantener así la “institucionalidad de la República y los valores democráticos”.