El Consejo señaló que la actividad y la demanda se han mostrado más débiles que lo contemplado en el último Informe de Política Monetaria (Ipom).
Por P. San Juan.
Tal como esperaba el mercado el Consejo del Banco Central acordó este martes mantener la tasa de interés en 3% y reiteró el sesgo neutral de la política monetaria.
Este es el octavo mes consecutivo en que el instituto emisor deja sin cambios la Tasa de Política Monetaria (TPM).
En su comunicado el Consejo señaló que en el ámbito externo, la mayor novedad ha sido la volatilidad de los mercados financieros, asociada a los eventos en Grecia y China, la que ha tendido a moderarse en lo más reciente.
En este contexto, luego de mostrar una caída importante durante el mes, el precio de los activos de mayor riesgo tuvo una recuperación relevante en los últimos días. El dólar se apreció a nivel global. Los precios de las materias primas, en particular el cobre y el petróleo, descendieron, añade.
Respecto al contexto interno indica que el IPC de junio fue superior a lo proyectado y su variación anual volvió a ubicarse por sobre 4%. A un año plazo, las expectativas de mercado aumentaron, aunque a dos años permanecen sin cambios.
«La evolución de la inflación seguirá monitoreándose con especial atención. Por su parte, la actividad y la demanda se han mostrado más débiles que lo contemplado en el escenario base del IPoM y las expectativas privadas de crecimiento han bajado para este año y el próximo. Los indicadores de confianza no se han recuperado. En el mercado laboral, el ritmo de creación de empleos sigue acotado y los salarios nominales se han desacelerado. A su vez, el peso se ha depreciado», advierte.
El Consejo reafirmó su compromiso de conducir la política monetaria con flexibilidad, de manera que la inflación proyectada se ubique en 3% en el horizonte de política. Cambios futuros en la TPM dependerán de las implicancias de las condiciones macroeconómicas internas y externas sobre las perspectivas inflacionarias, señaló.