El Gobierno aún no entrega una propuesta sobre qué ocurrirá con estas temáticas. De las 13 aseguradoras privadas, seis corresponden a entidades cerradas, creadas por empresas para sus trabajadores en el marco de negociaciones colectivas y de ellas cuatro pertenecen a Codelco.
Por Nicolás Vivanco.
Si bien en un principio el Gobierno había anunciado que en septiembre se haría ingreso del proyecto de ley que pretende reformar el sistema de salud privado, y de paso el público, la fecha se ha ido extendiendo producto de la complejidad en elaborar una fórmula que sea sostenible en el tiempo.
Las profundas diferencias con las isapres en el proyecto que elabora el Ejecutivo obligaron a constituir una mesa de trabajo con las aseguradoras, de la cual hoy se efectuará la segunda sesión. La preocupación y molestia de las isapres por la forma en que se ha desarrollado la instancia han llevado al gremio que las representa, encabezado por Rafael Caviedes, a acusar de improvisación al Gobierno y manifestar que existen cientos de temas que no han sido abordados.
En esa línea, la no claridad respecto a qué ocurrirá con los planes colectivos de salud, las isapres cerradas y los trabajadores independientes han comenzado a levantar suspicacias tanto en las isapres como en los beneficiados.
“El Gobierno ha dejado de lado temas muy relevantes de la reforma, como son los contratos colectivos y los contratos individuales de cotizantes voluntarios. En total corresponden a 20% o quizás más de la cartera sobre la cual tendrán que considerarse condiciones especiales”, explicó Rafael Caviedes, presidente de la Asociación de Isapres. “La autoridad no tiene respuesta para esto”, dijo.
Caviedes manifestó que en el caso de los cotizantes independientes, si se pretende financiar el plan con la cotización de salud más la prima comunitaria, “para estos trabajadores se tiene que fijar cuál es esa cotización; entonces, lo que va a tener que hacer la ley es fijar un precio mínimo”, agregó.
El líder de las isapres explicó que según lo que plantea el Gobierno cada isapre va a poder definir tres planes y cada aseguradora “va a tener que decir que el valor del plan A se financia con el 7% más la prima comunitaria, pero el valor mínimo es de X. De tal forma que si la cotización voluntaria del independiente es cero, la prima comunitaria va a tener que compensarla de alguna forma”, manifestó.
Por su parte, el presidente de Isapre Colmena, Gonzalo de la Carrera -empresa que no pertenece al gremio- aseguró que los trabajadores independientes y los planes colectivos son dos temas que quedaron ausentes en esta reforma. “No se consideró que hay contratos colectivos que representan más o menos entre el 15% y 20% de todos los afiliados isapres y me pregunto qué va a pasar cuando les comuniquen a los sindicatos que han logrado después de mucho esfuerzo obtener un beneficio para sus afiliados, que se le va a quitar un 6% de lo que cotizan”, dijo el ejecutivo. “En la improvisación de este proyecto de ley no se ha tomado en cuenta”, acusó.
Consultada la Superintendencia de Salud por las propuestas para abarcar estos tópicos, declinaron referirse al tema.
Los sindicatos
En el actual sistema de salud, a las siete isapres abiertas donde cotizan la gran mayoría de los casi 2 millones de afiliados al sistema privado, se suman seis entidades que son cerradas y su creación responde a que el empleador como beneficio a los trabajadores constituyó la isapre. En este sentido, Codelco cuenta con Río Blanco, San Lorenzo, Fusat y Chuquicamata, destinadas a sus distintas divisiones; mientras que SQM posee a Isapre Cruz del Norte y Banco Estado a Isapre Fundación.
Estas compañías entregan a sus trabajadores planes especiales, que en la gran mayoría de los casos no consideran discriminación por sexo, edad ni preexistencia, a su vez que tampoco se utiliza como referencia la tabla de factores. Estos beneficios han sido adquiridos por los sindicatos en negociaciones colectivas y la poca claridad respecto a qué podría ocurrir con estas instituciones comienzan a despertar la preocupación en el sector.
Así desde el sindicato de Banco Estado, que ayer entró en huelga por proceso de negociación con la compañía, aseguraron que es un tema que lógicamente preocupa, porque “nosotros tenemos más de 30 mil personas en la isapre, porque si bien es una isapre cerrada también tenemos personal del ministerio y cada persona tiene hasta 4 cargas”.
Desde la entidad manifestaron que están solicitando ayuda política a las tiendas de la DC y al PS, como también a la UDI y RN “para que se considere a la isapre cerrada en la reforma. “Nos han dicho que lo van a estudiar y estamos a la espera de una respuesta”, aseguraron.
“Nuestra idea es que nos apoye la Cámara de Diputados y el Senado. Estamos solicitando hora para hablar con la senadora Isabel Allende que habla directamente con la Presidenta Michelle Bachelet”, expusieron.
Por otro lado, Manuel Cañas, presidente del sindicato de la división andina de Codelco señaló que desearían que las isapres funcionaran en su totalidad como lo hacen en Codelco o como otras entidades, las fuerzas aéreas o armadas, que tienen una cobertura bastante mejor”. Para el líder gremial la isapre cerrada es un beneficio pactado, por ello “si el costo es 100 y el trabajador aporta con su cotización mensual y hay un diferencial, ese es el beneficio que pone el empleador”. Por ello aseguró que de existir cambios “lo que se debería hacer ahí es gestionar con Codelco este beneficio”.