En la Sofofa analizan pedir que el incremento final del impuesto de Primera Categoría a 27% y el paso al nuevo sistema semi integrado se materialicen post 2018. Mientras, la CChC solicitó extender los plazos para el cobro del IVA en la vivienda.
Por J. P. Palacios y L. Aravena.
Hace dos meses que el ministro de Hacienda Rodrigo Valdés anunció cambios o una simplificación a la Reforma Tributaria.
Desde ese día los empresariados agrupados en distintos gremios están elaborando, junto a sus equipos tributarios, propuestas para presentar a Hacienda en esta puerta que abrió la autoridad. De hecho, se reconoce que el subsecretario Alejandro Micco ha conversado con varios representantes tanto del empresariado como abogados especialistas, para conocer sus aprensiones, dudas y propuestas en torno a estos cambios que vendrían tras la discusión del proyecto de Presupuesto 2016.
Hasta ahora Hacienda ha conocido planteamientos de tres ramas, donde dos de ellas han puesto sobre la mesa la idea de postergar el alza de algunos impuestos.
Cabe recordar que la reforma establece una transitoriedad en el alza del impuesto de Primera Categoría desde un 21% en 2014 a un 27% a partir del 1 de enero de 2018. En esa fecha también empezaría a regir el nuevo sistema semi integrado y la renta atribuida, a la cual las empresas interesadas deberán optar en 2017.
La Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) analiza con su equipo tributario plantear la postergación de este cronograma hasta 2019, lo cual ya ha sido sondeado con Hacienda. Señalan, fuentes conocedoras del proceso, que si bien en un primer momento la respuesta fue un rotundo no, en el último tiempo la recepción ha mutado hasta “es probable”.
Esta idea surgió debido a la complejidad de la normativa, “lo que hace imprescindible una mayor cantidad de tiempo para su adecuada aplicación”, dicen cercanos a estas conversaciones. Esta fórmula ha sido socializada con algunos gremios los que estarían evaluándola, e incluso algunos solicitaron a sus asesores técnicos un informe para definir la conveniencia o no de este alargue.
Otra fuente admitió que no postergar la entrada en vigencia total de la Reforma Tributaria perjudicará a los pequeños empresarios, porque su complejidad les hará requerir una mayor cantidad de asesores tributarios, lo que encarecerá sus costos.
No cobrar IVA
Asimismo y por un carril distinto, una delegación de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) compuesta por el vicepresidente, Patricio Donoso Tagle, el gerente de Estudios, Javier Hurtado, junto al abogado jefe de la gerencia de Estudios, Gonzalo Bustos, y Encarnación Canalejo, concurrió el pasado 14 de agosto a Hacienda para sostener una reunión con Micco.
En la cita la entidad gremial solicitó extender el plazo de escrituración para las viviendas que hayan obtenido sus permisos de construcción este año . Cabe recordar que la Reforma Tributaria establece que las viviendas con promesas de compra-venta protocolizadas en 2016, quedarán exentas del impuesto sólo si la inscripción se efectúa ese mismo año, para lo cual el proyecto inmobiliario debería estar ya entregado.
La CChC se dirigió a la autoridad para que ese período se amplíe hasta 2017 considerando las condiciones económicas, donde la construcción es uno de los pocos sectores dinámicos y que está generando empleo.
Tasa de 30%
Otra propuesta que ha circulado por las oficinas de Teatinos 120 correspondería a la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC). Su idea es cambiar el régimen semi integrado por un aumento de la tasa del impuesto de Primera Categoría del 27% contemplado en la Ley a un 30%, pero volviendo a un sistema completamente integrado.
Sin embargo, no todos los gremios apoyan esta moción y otros la evalúan con mayor detalle. Asimet, que concuerda más con la idea, estima que mejor sería bajar la tasa del último tramo del Global Complementario a un 30%, creando así un sistema “Flat Tax”. “Esto no requeriría un sistema de créditos y podría no ser necesario llevar registros tipo FUT. Se igualan tasas para todos los contribuyentes, eliminando en gran medida incentivos de arbitraje”, indica el presidente del gremio, Juan Carlos Martínez.
En la SNA aún están estudiándola: “No tenemos una definición todavía, porque eso tiene que darse con una serie de otros elementos. Puede producir un efecto aquí, pero puede generar un efecto contrario allá (…) dependerá también cómo se planteen los estímulos a la inversión”. comenta Patricio Crespo, presidente de la entidad.
En tanto, el titular de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Ricardo Mewes, señala que todavía no hay una propuesta común: “El tema es súper complejo y tenemos que llegar a un consenso, de tal forma que la propuesta mire la realidad de cada uno de los sectores”.
En ese sentido, una fuente explica que el problema es que esta propuesta convendría a los grandes empresarios porque obtendrían un mayor beneficio en el pago de su impuesto Global Complementario. Sin embargo, para los otros más pequeños, una tasa tan alta podría perjudicar su negocio.