Una tiene larga trayectoria, ligada al desarrollo de la construcción en Chile, en tanto que la otra presenta un origen más moderno, vinculado a la creciente importancia y necesidad de especialización en la seguridad.

Por una parte, la ingeniería en construcción “se puede rastrear hasta la creación de las primeras instituciones de educación en el país y las escuelas de artes y oficios; aunque sin duda es con la aparición de la Universidad Técnica del Estado (1947) – conocida actualmente como Universidad de Santiago- que se concreta una carrera muy parecida a la actual”, comenta Ferrán Arias, director de las carreras de Ingeniería y Técnico en Prevención de Riesgos, sede Alameda, de Duoc UC. Con los años, el perfil profesional de estos egresados fue cambiando, así como lo han hecho los programas de estudios. “Con la creación de IP y CFT se consolida el hermano menor de esta carrera que es el Técnico en Construcción, especialidad que se imparte en pocos Centros de Formación o Institutos”, afirma el director de Duoc UC.

Por otro lado, la prevención de riesgos surge con la desaparición del experto práctico en esta materia, instancia en que se hizo perentoria la necesidad de contar con profesionales especializados, de acuerdo a lo comentado por Arias. “La capacidad de las universidades tradicionales en formar desde expertos en prevención a ingenieros mediante cursos de postítulo, no fue suficiente para la demanda del mercado, y como carrera propiamente tal (Ingeniería en Prevención de Riesgos), pocas entidades superiores la imparten”, explica Ferrán Arias y añade que desde la aparición de los IP y CFT se vio como oportunidad el hacerse cargo de esta necesidad y rápidamente aparecen las carreras de Técnico en Prevención y de Ingeniería en Prevención que, bajo diversos nombres, han llevado a la actual situación de tener una amplia oferta.

Interés de los jóvenes

De acuerdo a la experiencia en Duoc UC, un buen número de alumnos que ingresan a las carreras de construcción ya están insertos en el sector o provienen de familias que lo están, por lo que el nivel de conocimiento sobre la carrera, expectativas y vocación son considerables.

En cambio, en el área de la prevención, debido a su menor trayectoria, sucede lo contrario. “Hasta el año 2013, la carrera de Prevención de Riesgos, parecía no tener límite en el número de postulantes que la solicitaban: la bonanza económica, la alta demanda laboral, los buenos sueldos de mercado y el accidente de la mina San José hizo que surgiese un mayor interés por esta.

En los últimos años, la situación se ha normalizado de forma acelerada, teniendo hoy cifras de empleabilidad sectoriales cercadas al 87%”, manifiesta Ferrán Arias. Una casa de estudios que la imparte desde hace una década es Iplacex.

“Hoy contamos con las carreras de Ingeniería en Prevención de Riesgos y el Técnico en Prevención de Riesgos en modalidad online, disponible desde cualquier parte de Chile y presencial en nuestras sedes de Santiago y Copiapó, mientras que en Talca ofrecemos sólo la especialidad Técnica”, señala Julio Sánchez, director de docencia de Iplacex.

Demanda industrial

“Hay un interés creciente de los jóvenes por estudiar estos nichos menos explotados. En general, las carreras más conocidas son topografía, prevención de riesgos, ingeniería electrónica, pero también hay otras totalmente nuevas, como Técnico en Instalaciones Fotovoltaicas y Térmicas o Técnico en Fabricación y Montaje Industrial, áreas muy específicas que nos ha demandado el mundo industrial”, afirma Sergio Becerra, director del CFT ProAndes de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC).

Ahora, Sergio Becerra da cuenta de que por su alta empleabilidad y porque hay un déficit de técnicos, en general todas las carreras de construcción tienen alta demanda. Respecto a Prevención de Riesgos, las proyecciones también son auspiciosas. Así lo sostiene Julio Sánchez, de Iplacex: “El área está constantemente demandando nuevos expertos y profesionales con conocimientos y competencias que vayan de la mano con el desarrollo de la industria.

El reglamento sobre Prevención de Riesgos Profesionales del Ministerio del Trabajo indica en su artículo 8° que toda empresa con más de 100 trabajadores deberá contar con un Departamento de Prevención de Riesgos Profesionales que deberá ser dirigido por un experto en el área, entonces el campo laboral es siempre creciente y los egresados pueden optar a buenos trabajos, movilidad entre empresas y remuneraciones competitivas”.

 

Fuente: La Tercera