Desde el 26 de junio rige la nueva norma de etiquetado de alimentos, que obligará a los productos envasados que contengan exceso de sodio, azúcar, grasas y calorías a tener un octógono negro que advierta que ese alimento es alto en el nutriente correspondiente.

Pero esos no serán los únicos productos que serán impactados por la normativa, pues el Ministerio de Salud está alistando otra serie de modificaciones para complementar el nuevo etiquetado, y que afectará esta vez a los alimentos que tienen propiedades consideradas positivas.

Por ejemplo, actualmente se acepta que si un alimento tiene altas concentraciones de fibra, calcio o hierro -considerados buenos para las personas-, estos puedan destacar en sus envases que su contenido es «alto» en el nutriente que corresponda. Pero eso se terminará, porque según explica la jefa del departamento de Alimentos y Nutrición del Ministerio de Salud, Lorena Rodríguez, «se podría prestar para confusión que cuando un producto sea ‘alto en’ resulte malo, como ocurre con las grasas o azúcar, y sea bueno cuando se habla de otros alimentos».

Para esos nutrientes positivos se podrán ocupar, de acuerdo a la propuesta de Salud que está en consulta pública, otros descriptores, como «buena fuente» o «contiene», por lo que estos productos también deberán cambiar el diseño de sus envases, que es una de las principales críticas de la industria sobre la nueva legislación.

Asimismo, hoy existen 18 tipos de mensajes saludables que los productos pueden llevar impresos a sus envases y que relacionan la ingesta de determinados nutrientes con una condición de salud. Se trata de lecturas del tipo «las dietas bajas en sodio pueden reducir el riesgo de desarrollo de hipertensión arterial», o «entre muchos factores de riesgo que inciden en las enfermedades cardiovasculares, las dietas bajas en grasas saturadas y colesterol contribuyen a reducir el riesgo de enfermedades».

El cambio que prepara Salud es que esos mensajes no podrán seguir en los envases de aquellos alimentos que tengan el logo negro con la advertencia «alto en». «Hemos sido muy protectores con este tipo de mensajes, porque no queremos que la gente se forme ideas que no son, y lo que vemos es que si un producto es ‘alto en’ y después lee el mensaje saludable, entonces estaría recibiendo información contradictoria», explica Rodríguez.

Salud todavía debe afinar estas modificaciones, por lo que todavía no existe una fecha clara de su entrada en vigencia.

Marisol Figueroa, gerenta general de la Asociación de Alimentos y Bebidas de Chile (AB Chile), advierte que «son al menos unas cinco modificaciones adicionales a la de etiquetar con el logo negro; entonces, uno podría calcular que vamos a tener cambios en 2016, con la entrada en vigencia del nuevo etiquetado, en 2017 con estos otros cambios, y en 2018 y 2019 de nuevo por la Ley de Etiquetado, porque aumentan las exigencias de nutrientes críticos. O sea, vamos a cambiar los envases una y otra vez».

A su juicio, eso hace que «operativa y logísticamente estén pidiendo algo que es imposible», y además plantea que el no poder usar el «alto en» para propiedades positivas, «no va en línea con las normas internacionales y se hace sin estudios detrás, pensando en que los consumidores no saben nada».

De todas maneras, la industria ya está tomando acciones ante los inminentes cambios. Por ejemplo, productos que se vendían como «light» sacaron esa palabra de su nombre. «No conozco el caso en particular, pero probablemente con la nueva norma quedarían con rótulo negro y se están ajustando», dijo Rodríguez.

 

Fuente: El Mercurio