El programa de gobierno de la administración Bachelet plantea que a marzo de 2018 quedarán construidos 20 hospitales, otros tantos estarán en obras, e igual número en estudio o licitación.
El año pasado, y después de enfrentar críticas por el retraso de ese plan, la ministra de Salud, Carmen Castillo, entregó una lista de 27 recintos en los que se estaba trabajando para que queden construidos, tal como muestra hoy el sitio web de la cartera (www.minsal.cl).
Ayer, en su cuenta pública 2015, Castillo dio a conocer el avance del programa de infraestructura, según el cual actualmente se están ejecutando las obras de 22 establecimientos.
De ellos, 19 están entre los 27 hospitales que deben quedar listos al final del gobierno. Sin embargo, ocho de los recintos comprometidos para 2018 todavía no inician obras: Makewe, Queilén, Collipulli, Curacautín, Huasco, Diego de Almagro, Chile Chico y Cochrane.
«Los hospitales están en la ruta establecida para cada uno de los proyectos. Los 27 hospitales están avanzando para dejar construidos 20. De los 27, puede que no todos se construyan en su totalidad, pero van a quedar en etapa de construcción», explicó la subsecretaria de Redes Asistenciales, Gisela Alarcón.
Agregó, eso sí, que «en el segundo semestre (de este año) vamos a tener todo el plan de inversiones en construcción (…). Los hospitales que tienen que quedar construidos, más los recintos de atención primaria».
Esto último, porque el programa de gobierno también contempla levantar 100 centros de salud familiar, 100 centros comunitarios de salud familiar y 132 servicios de urgencia de alta resolución (SAR). De esos 332 recintos, 41 están terminados -algunos de ellos ya operando-, pero todavía falta levantar los 291 restantes, de los cuales solo 90 están hoy en obras.
Para cumplir los compromisos, Alarcón dijo que se está acelerando la ejecución del presupuesto para infraestructura, que a la fecha bordearía el 10%.
Castillo también se refirió al nuevo hospital de Rancagua, que comenzó a operar este mes -luego del traslado desde sus antiguas instalaciones- y donde los funcionarios ya han denunciado deficiencias y realizado un paro. «Quiero llamar a la calma (…). Lo que pasa no es falta de recursos, sino que es la adecuación normal en un nuevo hospital», planteó.
Fuente: El Mercurio