Fueron momentos difíciles para las pequeñas empresas del rubro, que poco a poco comienzan a salir a flote tras la paralización de sus labores. No es un misterio que eran pocos los que conocían muy bien los protocolos sanitarios cuando recién comenzó la pandemia.
En el caso de la construcción, sería luego de unos meses que se implementaría un protocolo sanitario en las grandes faenas para que estas pudieran funcionar. Pero, ¿qué pasó con las pymes de construcción? Según cifras de la Mutual de Seguridad, en Chile existen 14.307 pequeñas empresas ligadas al rubro, es decir, que promedian nueve trabajadores, las cuales tuvieron un período cuesta arriba en los inicios de la pandemia. Recomendamos ¿ En qué estado estarán las pymes de construcción?
“La pregunta era, cómo hace una microempresa para hacerse cargo de todas las exigencias que habían. Ahí hubo una muy buena decisión respecto del gremio, y la CChC estableció tempranamente los protocolos que estas debían cumplir, y para eso, la Mutual tenía que estar al servicio y poder ayudar a estos clientes más pequeños a que pudieran entrar a las constructoras más grandes a prestar servicios siguiendo todas las medidas necesarias”, explicó Marilo Cáceres, gerente Pymes de Mutual de Seguridad. La profesional añadió que recién este año se pudieron afiatar de mejor manera estas pymes. “Este año ha sido más expedito, más fácil y llevadero este proceso, porque ya están los protocolos, se conoce cuales son las responsabilidades del dueño de la empresa, o de los trabajadores, está más claro cómo se difunden las medidas preventivas y cómo se implementan, etc. Hoy día ya es mucho más fácil y fluido retornar a la presencialidad”, asegura.
Ojo con la accidentabilidad
Según Cáceres, aunque sigue siendo alta, la accidentabilidad no presentó mayores variaciones desde hace unos años hasta ahora, considerando las pymes de construcción. Sin embargo, si consideramos que en 2020 y 2021 no estuvieron todos los trabajadores en terreno, es una situación preocupante. “Cómo está todo el foco en covid, se están descuidando los riesgos clásicos, y se siguen accidentando de forma grave en la construcción los trabajadores en caídas de altura, aplastamiento, golpes traumáticos. Lo que me preocupa es que la construcción, siendo una actividad de alto riesgo técnico y donde hay alto potencial de daño a los trabajadores, podamos terminar el año con mucha reactivación económica pero con muchos trabajadores fallecidos o lesionados graves”, señaló. “Si lo miramos en tasas, se mantuvieron más o menos iguales la cantidad de accidentes en la construcción respecto a años anteriores. Eso es preocupante, porque igual sabemos que no está la totalidad de trabajadores circulando, entonces a medida que empiece a aumentar la circulación podríamos tener más trabajadores expuestos, o sea, es posible proyectarse con más accidentalidad que en los años anteriores”, agregó.
Para ello existen varios programas. Por ejemplo, en la página ‘Más prevención para un nuevo contexto’, sitio en el que existe mucho material descargable y tutoriales para instruirse de la mejor manera al ingresar a una obra. “Tenemos súper claro: para llegar a más trabajadores y entregar seguridad, salud y protección, es muy importante cómo nos vamos vinculando con los gremios y con aquellas asociaciones que están vinculadas con la construcción. De esta manera podemos hacer más cobertura, llegar a más trabajadores y sensibilizar sobre la importancia del cuidado de la vida de los trabajadores como un elemento clave en la sostenibilidad de los negocios”, sentenció.
Fuente: La Cuarta