Ante las cifras de Carabineros, que van en línea con las registradas en 2021, expertos dicen que es complejo cambiar un hábito en el corto plazo y que la solución al problema, por ahora, está en realizar una mayor fiscalización y que las personas tengan conciencia de la gravedad de esa «costumbre».
Más de ocho mil infracciones ha cursado Carabineros durante este año por conducir hablando por teléfono móvil sin manos libres o por manipular un dispositivo electrónico. Pese a que este año entró en vigencia la Ley No Chat, la cifra entregada por la institución -actualizada al 12 de junio- va en línea con las controladas durante todo 2021, año en que se registraron 16.102 casos.
Según la sección de Automatización de las Unidades Policiales (Autopol), el registro de infracciones arroja 8.246 casos, de los cuales 7.218 son por conducir un vehículo hablando por teléfono celular sin manos libres. La diferencia (1.028) es por manipular cualquier dispositivo electrónico, como una tablet.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) informa que el uso del teléfono al momento de conducir incrementa cuatro veces la probabilidad de estar involucrado en un siniestro vial. Y en ese contexto, durante 2020 en Chile se registraron más de 21.756 siniestros a causa de la distracción al volante, dejando 186 fallecidos y 12.007 lesionados. Y en 2021 hubo 27.056 accidentes por conducción no atenta y 223 fallecidos, además de 14.992 personas con algún tipo de lesión.
En la última década, el peor año en cuanto a siniestros fue 2019, con 27.651 accidentes por conducción no atenta a las condiciones del tránsito. Ese año, 141 personas perdieron la vida en dichos accidentes.
“La fiscalización de esta ley y de toda la ley de tránsito es un desafío considerando la fragilidad vista en estos últimos años. Dado esto, se está trabajando con Conaset para fiscalizar la Ley No Chat con cámaras viales y así fortalecer, considerando que conducir no atento es la principal causa de siniestros viales en Chile y la segunda causa de más fallecidos en las vías”, dice Claudia Rodríguez, directora de la ONG No Chat.
La misma opinión tiene Alberto Escobar, gerente de Movilidad de Automóvil Club de Chile, quien sostiene que para que la ley cumpla cabalmente su objetivo “es necesario que aumente drásticamente la fiscalización en las calles, para que realmente se incorpore el hábito y que existan mayores campañas de sensibilización que permitan visibilizar este severo problema”.
“Lamentablemente, en Chile aún prevalece el acatamiento voluntario a las normas del tránsito, donde hay una suerte de analfabetismo vial entre los automovilistas que les impide conocer cuáles son sus deberes y obligaciones en el sistema vial. Los chilenos suelen minimizar los riesgos que existen sobre el uso de estos dispositivos al volante y no lo relacionan con una conducta de riesgo que puede provocar un siniestro vial”, añade Escobar.
En el primer mes de vigencia de la Ley No Chat, Carabineros cursó infracciones a 2.503 conductores: 2.160 por hablar sin manos libres mientras conducía y 343 por manipular algún dispositivo móvil. Estas infracciones se concentraron en la Región Metropolitana (914, con el 36,5%), Maule (261, 10,4%), Los Lagos (251, 10%) y Valparaíso (212, 8,4%).
Y lo anterior casi no ha variado. Las regiones Metropolitana (2.852 partes, 34,5%), Los Lagos (806, 9,7%), Maule (797, 9,6%), Valparaíso (683, 8,2%) y Biobío (608, 7,3%) son las que más infracciones registran, mientras que entre las comunas, la que encabeza el ranking es Puerto Montt (397), seguida de Santiago (310), Puente Alto (268), Temuco (230), Buin (192), Osorno (182) y Talca (177).
Para Luciano Ahumada, director dela Escuela de Informática y Telecomunicaciones de la UDP, “es difícil generar conciencia cuando hay una dependencia tan grande de la tecnología. Los nuevos sistemas tecnológicos incorporados en los automóviles sólo marcarán una diferencia: que la persona no tiene el celular en sus manos, pero el problema de fondo sigue siendo el mismo y es que no están en un 100% concentrados en la única labor que debieran estar haciendo y que es conducir”.
El martes 12 de octubre del año pasado se publicó en el Diario Oficial la denominada Ley No Chat -Ley 21.377, que modifica la Ley de Tránsito 18.290-, que castiga con mayor severidad conductas irresponsables al volante relacionadas al uso de celulares y de otros dispositivos móviles que no son originales del vehículo.
Pero el 14 de marzo de este año se dio un paso más adelante y se promulgó el Decreto 73 que, en esencia, corresponde al reglamento de la ley mencionada y modifica el Artículo 19, haciendo más específico y dejando sin lugar a dudas respecto a los dispositivos que se pueden utilizar al momento de manejar. En breve, la modificación tenía por objetivo mejorar la seguridad vial aumentando las sanciones por el uso de celulares, tablets u otros dispositivos electrónicos mientras se conduce un vehículo, incluyendo cuando está detenido en un signo Pare o luz roja.
Pero la Ley No Chat no sanciona el manos libre ni tampoco utilizar app (georreferencia) por audio o voz, “siempre y cuando se planifique la ruta previa y no se manipule durante el trayecto”, añade Rodríguez. “Todo lo que evite que el conductor se distraiga siempre irá en la línea correcta de salvar vidas, pero recordar que las distracciones al volante son visuales, auditivas, físicas y cognitivas”.
Escobar aporta un dato más: “En Chile, sólo siete de cada 10 automovilistas utiliza los sistemas de altavoz incorporados en los nuevos modelos de automóviles. Hoy es urgente que se diseñe un programa serio y efectivo de fiscalización, ya que se ha comprobado que hay un 20% de conductores refractarios en nuestro país que no están dispuestos a modificar sus conductas detrás del volante y que no les interesa respetar las normas del tránsito. Hay una sensación de relajo en los controles. La Ocde recomienda que se fiscalice a un tercio de los conductores al año y eso en Chile jamás ha ocurrido”.
Según el estudio “Distractores al volante”, dado a conocer a fines de abril por Conaset, la Mutual de Seguridad y la ONG No Chat, un 33,1% de los conductores usó su teléfono móvil y, de ellos, el 15,2% lo hizo con el fin de chatear.
La investigación se centró en las cinco esquinas con mayor tasa de accidentes (Av. Vespucio con Gran Avenida, Alameda con Nicasio Retamales, Av. Grecia con Tobalaba, Av. Santa Rosa con Vespucio y Alameda con Santa Rosa). Y el resto de los resultados aporta aún más: el 6,7% de los conductores observados hablaba a través de su celular, un 27,7% lo portaba. De ellos, el 56,8% eran usuarios mujeres y el 43,2%, hombres.
Y la ley establece que manipular un dispositivo de telefonía móvil o cualquier otro artefacto electrónico o digital al conducir es una infracción gravísima dentro de la Ley de Tránsito, que tiene una multa asociada de entre 1,5 a 3 UTM (entre $ 86.000-$ 172.000, aprox.). Además, comprende la suspensión de la licencia de conducir entre cinco y 45 días. En caso de reincidencia, la suspensión de licencia puede ser de hasta 90 días.
Fuente: La Tercera