Calificó como “una gran exageración” un artículo del FT que recientemente cuestionó la robustez de Chile.
El investigador sénior del Centro de Estudios Públicos (CEP) y ex presidente del Banco Central Vittorio Corbo anticipó un crecimiento de la economía “en el rango del 3% al 4%” durante este año, con una inflación anual a diciembre que se acercaría al 3%.
“Mirando hacia delante, el crecimiento del consumo privado debiera seguir moderándose por un menor dinamismo esperado en el mercado laboral y condiciones financieras internacionales menos favorables. La inversión seguirá débil por la maduración del ciclo minero, términos de intercambio y condiciones financieras externas menos favorables y la incertidumbre asociada al cambio de gobierno”, indicó Corbo en un análisis.
Recordó que en la última Reunión de Política Monetaria de este mes, el Banco Central de Chile introdujo un sesgo bajista en la futura evolución de la Tasa de Política Monetaria (TPM) -que actualmente se ubica n 4,5%- por la ampliación de las brechas de capacidad, lo que pondría en riesgo el logro de la meta de inflación hacia delante, y añadió que el fuerte sesgo bajista de la TPM ha impulsado una depreciación adicional del peso.
“En el escenario más probable, vamos a tener un par de bajas adicionales en la TPM, de 25 pips cada una, en los próximos meses”, anticipó.
En cuanto a las perspectivas para el mediano plazo, sostuvo que las condiciones económicas no favorecen una expansión en torno al 5% anual. “El crecimiento potencial será menor debido a la caída en la tasa de crecimiento del empleo (por un lado ya nos encontramos en pleno empleo, y por el otro, no hay avances en facilitar la incorporación al mercado laboral de mujeres y jóvenes con bajo capital humano), a los problemas de oferta en energía e infraestructura, a los menores términos de intercambio y al regreso a la normalidad de las condiciones financieras internacionales”.
De todos modos, recalcó que Chile está bien preparado para enfrentar este escenario más adverso y mencionó el marco de política monetaria con un Banco Central autónomo, inflación en torno a la meta y un tipo de cambio flotante que permite tener una política monetaria propia y acomodar los ajustes necesarios en el tipo de cambio real que requiere la desaceleración de la demanda interna. Lo anterior -dijo- acompañado por una política fiscal responsable, “donde gracias a la regla fiscal, el gasto público es acíclico”.
En esa línea, calificó como una “gran exageración” un artículo reciente del Financial Times donde se cuestiona la robustez de Chile. “En este artículo, citando un estudio de Schroders, se informa que Chile tendría una vulnerabilidad externa elevada, debido a que las necesidades de financiamiento externo superan la liquidez disponible, medido por las reservas internaciones. Sin embargo, el artículo no tiene en cuenta que el Estado de Chile posee, además, los fondos soberanos y otros activos del Tesoro Público con lo que se supera las necesidades de financiamiento y, además, los fondos de pensiones tienen inversiones líquidas por más de US$ 60.000 millones en el extranjero que, frente a cambios importantes en la rentabilidad relativa de los activos locales, son susceptibles de reasignarse en el mercado local”, dijo.
Por otro lado, agregó, Chile tiene la gran protección de un sistema financiero “considerado entre los más robustos del mundo, con reducida exposición de sus empresas y personas al riesgo cambiario y un Banco Central que opera con un tipo de cambio flexible y con una inflación que recién está regresando a la meta”.