Mientras en Caimanes celebran el fallo, algunos microempresarios de Salamanca protestaron en favor de la empresa como fuente laboral.
Por X. Bertin, C. Riffo y M. Jarpa.
Mientras la minera Los Pelambres inicia su batalla judicial para impedir la demolición del tranque El Mauro, dictaminada este lunes por el Juzgado de Letras de Los Vilos, en Salamanca -donde se ubican las faenas-, un grupo de comerciantes y contratistas se movilizaron manifestando su rechazo a la decisión judicial. Esta pondría en riesgo -según ellos- su fuente laboral como prestadores de servicios a la minera en las áreas de construcción, hotelería, restaurantes, transporte y comercio, entre otros.
En caravana viajaron a Los Vilos, en la IV Región, para entregar una carta en el juzgado, expresando “el descontento por el fallo emitido” y “las consecuencias socioeconómicas y ambientales” que generaría el fin del relave si la empresa deja de funcionar.
“Aquí no hay neumáticos, no hay piedras, no hay encapuchados. Estamos de frente, solicitando llegar a una solución en conjunto con todos los actores para poder seguir con empleo”, señaló Roberto Munizaga, quien entrega servicios a la minería.
En paralelo, dirigentes de los sindicatos de trabajadores de Pelambres y de los contratistas se reunieron en Santiago con la ministra de Minería, Aurora Williams, para plantear la misma preocupación. “No vamos a comentar fallos de otro poder y si hay un fallo negativo para la empresa, deberá acatarse”, precisó la autoridad.
En Caimanes, la comunidad que luchó contra la minera está impaciente por la ejecución del fallo que les devolvería su estero, tras 14 años de lucha judicial. “Lo que resta es respetar una sentencia histórica que logramos como comunidad. Ahora la minera tiene que cumplirla, parar de echar relaves al tranque y empezar con la demolición, proceso que sabemos podría durar años ”, dijo Cristián Flores, líder del movimiento contra la minera en Caimanes.
Además, el dirigente le restó representatividad a la movilización de los empresarios de Salamanca. “Son pocos y son los que han vivido siempre de la minera. Pero a ellos no les falta el agua ni se ven afectados por el relave como nosotros, por eso lo defienden. No andaba la gente común del pueblo, además en Caimanes hay sólo tres familias que apoyan a la empresa. Todos nos conocemos perfectamente”, aclara Flores.
Ante la eventual crisis laboral, el vocero del Movimiento Social por la Recuperación del Agua y la Vida, Rodrigo Faúndez, dijo que “si el Estado autorizó un mal proyecto a lo largo de los años, con las consecuencias ambientales a la vista, ahora debe hacerse cargo y generar un plan laboral para la gente”.
Apelación en La Serena
Tras ser notificada, sólo un día se demoró la minera en presentar un recurso ante la Corte de Apelaciones de La Serena para intentar revertir el fallo del Juzgado de Letras de Los Vilos, que consideró insuficiente el plan presentado por la empresa para restituir el curso del estero Pupío. “Tenemos la convicción que el plan propuesto es absolutamente suficiente para garantizar el libre escurrimiento de las aguas del estero Pupío hasta la localidad de Caimanes. Confiamos que la solicitud de suspensión será rechazada toda vez que es legalmente improcedente”, señaló Andrés Morán, gerente de Asuntos Públicos de Los Pelambres.