Parlamentarios preparan sus indicaciones. A una semana de cumplirse el plazo van más de 60 indicaciones y por las conversaciones se prevé que fácilmente superarán el centenar. Gobierno esperaba acordar esta semana sus propuestas con el oficialismo para continuar la coordinación en los ajustes al proyecto.
Por C. Torres, M. Leiva y P. Toro.
Poco tiempo tuvo el ministro de Hacienda, Alberto Arenas, para congratularse con el 2% que alcanzó el Imacec (Indice de Actividad Económica) en febrero, ya que los parlamentarios de la Nueva Mayoría lo “aterrizaron” abruptamente al abordar las discrepancias por la reforma laboral durante la reunión almuerzo habitual de los lunes. Y solicitaron a la autoridad una reunión urgente, con la presencia de la ministra Javiera Blanco, para analizar el contenido del proyecto y de las indicaciones que a partir del lunes se votarían en la Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados.
Fue el presidente de la comisión de Hacienda de la Cámara, diputado Pepe Auth (PPD), quien abrió los fuegos al señalar: “Yo pregunté respecto del acuerdo de la reforma laboral, porque se ha ido desordenando. Le hice ver que el Gobierno tenía que dar señales claras, porque no podía ser que el presidente del PS (Osvaldo Andrade) estuviera, luego de un acuerdo que fue difícilmente construido, capitaneando indicaciones que cambian los términos del acuerdo”.
Se refería a los anuncios, tanto desde la DC como del PS, de insistir con la negociación por rama cuando el proyecto del Gobierno, difundido en el trabajo prelegislativo, sólo se refería a la negociación colectiva dentro de la empresa, como unidad particular. “Dije que no podía comprometer a mis diputados si el presidente del partido de la Presidenta Bachelet proponía salirse de ese acuerdo”, sostuvo Auth.
Le secundó en esta opinión el diputado Pablo Lorenzini (DC), quien indicó que en su partido no hay una sola postura y que tanto él como su par, Ricardo Rincón, no son partidarios de extender la negociación más allá de la unidad productiva. “Han surgido varias discrepancias dentro de la Nueva Mayoría, éste no será un tema fácil; por eso se tiene que hacer un nuevo trabajo legislativo antes del debate en la sala”, indicó el parlamentario.
De hecho, anticipó que la Comisión de Hacienda está interesada en revisar la reforma laboral tras la comisión de Trabajo: “no estamos todos convencidos de la negociación por rama, aquí no es llegar y bajar banderas”, indicó Lorenzini.
Más de 100 indicaciones llegarían
En tanto, la comisión de Trabajo prosiguió ayer sus audiencias, mientras que las diversas bancadas están preparando las indicaciones a este proyecto antes del plazo que expira el próximo lunes 13.
A las 20.00 horas en el Ministerio de Hacienda (Teatinos 120), ayer fueron citados los parlamentarios de la Nueva Mayoría que integran las comisiones de Trabajo de la Cámara y el Senado para continuar con las conversaciones para la presentación de indicaciones al proyecto. La cena, donde participaron los ministros de Hacienda y Trabajo, con sus respectivos asesores, aún se estaba desarrollando al cierre de esta edición.
En definitiva, señalan fuentes del proceso, la idea es cerrar esta semana las indicaciones que el Ejecutivo presentará, donde ya existen acuerdos en torno a eliminar las sanciones dirigidas al movimiento sindical y sus dirigentes; la definición de pacífica de la huelga; la mediación forzada y las nuevas condicionantes para el desafuero.
Donde aún no hay acuerdo para avanzar es en negociación ramal. Asumiendo esto, el diputado socialista Osvaldo Andrade, junto a otros parlamentarios, entre ellos Tucapel Jiménez (PPD) y René Saffirio (DC), Patricio Vallespín (DC) -todos de la comisión de Trabajo- presentaron una indicación al respecto, revelando la división en el bloque oficialista frente al tema.
No obstante algunos de los parlamentarios firmantes reconocen que “podría no tener futuro”, pues admiten que cualquier iniciativa ligada a la negociación colectiva debe tener respaldo del Ejecutivo.
A esta indicación se sumaron alrededor de 60 que ya presentó el diputado Gaspar Rivas (independiente), muchas relacionadas a la negociación colectiva, que nuevamente se cruza con las facultades del Ejecutivo.
También en los próximos días los diputados independientes Gabriel Boric (también de la comisión) y Giorgio Jackson incorporarán en conjunto sus ajustes al proyecto, donde también incluirán negociación por rama.
A esto se sumarán las indicaciones de los diputados del PPD, Cristián Campos y Jiménez. El primero señaló que sus propuestas se enfocarán en acotar los servicios mínimos, terminar con cualquier noción de criminalización de la huelga y, obviamente, la negociación por rama.
La preparación de la Alianza
Durante todo el fin de semana largo, los parlamentarios de la UDI estuvieron trabajando las indicaciones que se centrarán en objetivos bien definidos.
Propondrán establecer el mismo procentaje de titularidad sindical para negociar los temas de adaptabilidad, o distintos a la negociación colectiva.
Incorporarán una norma para “facilitar y simplificar” la creación y disolución de los sindicatos.
“También buscamos aclarar ciertas partes de la reforma cuya redacción no dalas garantías que la ministra Blanco ha señalado”, comentó el diputado UDI, Felipe de Mussy.
En ese plano buscarán esclarecer el sentido del no reemplazo en huelga, en torno a que el actual proyecto sólo prohibiría el reemplazo con trabajadores externos, y no evitaría el reemplazo de la función propiamente tal cuando un sindicato realice la huelga.
Otro tema que abordaron durante el fin de semana es la definición de servicios mínimos, “debe ser antes de que parta la negociación colectiva. Como está redactado el texto pueden definirse antes o durante la negociación”, indicó el parlamentario.
También plantearán la posibilidad de que el sistema de mediación sea ejercido por “profesionales independientes” tal como funcionan en los tribunales de familia.
“Algo que es aparte , pero creemos que es atingente a esta discusión, es que la Dirección del Trabajo se modernice y se integre al sistema de Alta Dirección Pública”, acotó De Mussy.
En tanto, en Renovación Nacional están preparando más de 40 indicaciones, que también serán presentadas el próximo lunes.
Según explicó el diputado Nicolás Monckeberg, “todas van en la línea de que la negociación colectiva es un derecho de los trabajadores, no del sindicato”.
En este contexto, una de las indicaciones apuntará a tener un mínimo de representatividad para la titularidad sindical de un 30%, y no sólo en la empresa sino también en sus distintas áreas.
Además solicitarán reponer el descuelgue en época de huelga y a los grupos negociadores.
En cuanto al reemplazo en huelga solicitarán sustitución con trabajadores internos; y, en extensión de beneficios buscar equilibrios y equidades.
Monckeberg explicó que la idea es que los trabajadores no sindicalizados que cumplan la misma función de un trabajador sindicalizado reciba los mismos beneficios colectivos, “en caso contrario estaríamos frente a una discriminación”.