“Me preocupa que organizaciones de distinto tipo se nieguen a discutir si no es en los términos que ellos exigen”, expuso.
Por Romina Jara O.
Un día de definiciones protagonizó ayer el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés. Aprovechando la plataforma que le ofreció el seminario de Moneda Asset Management -con una audiencia inclinada a los hombres de negocios-, el personero hizo un recorrido por su visión sobre los temas pendientes que enfrenta el país y el tono del debate que han generado las reformas que impulsa el gobierno.
Y si bien recordó las décadas de gran crecimiento que ha tenido Chile, también pidió estar conscientes que «no hemos sabido recoger bien las aspiraciones de muchos». Así, acotó, «la percepción de desigualdad se ha vuelto cada vez más nítida, conocida y reconocida por todos».
Valdés agregó que hoy «el sistema político tiene menos capacidad para procesar y encausar las soluciones a estos problemas, y esto afecta la confianza y la economía».
«Tenemos un ambiente de mucha más crispación de lo que es saludable tener en una economía. Esta crispación tiene efectos concretos en la confianza (…) hay que hacer un esfuerzo de todos para construir un mayor grado de entendimiento y acuerdo y hay que atreverse de ver más allá y escuchar de verdad a todos, particularmente a quienes tienen ideas distintas», concluyó.
Entre sus inquietudes, el ministro citó primero: «Me preocupa que organizaciones de distinto tipo se nieguen a discutir si no es en los términos que ellos exigen o buscan imponer vetos sobre determinadas materias». Luego, dijo: «Me preocupan también algunos debates cargados de prejuicios y que sólo buscan culpables. Me preocupa que digan que todo se ha hecho mal y, por el otro lado, se reclame que se ejerce un chantaje que está paralizando al país. Esto sólo lleva al atrincheramiento de posiciones».
Así, Valdés reforzó que «quienes dicen que se trata solamente de frenar todas las reformas, tienen un diagnóstico equivocado, eso sólo postergaría los dilemas e incertidumbres, entonces el desafío es encararlos. Y quienes dicen que hay que hacer todo ya, hoy día y como uno quiere, pierden de vista que los países se construyen gradualmente y entre muchos», fundamentó.
El sello de la responsabilidad
Junto con enfatizar el compromiso de trabajar para fortalecer el crecimiento en un marco de seriedad fiscal, sostuvo que el gobierno busca jerarquizar los compromisos y asegurar que se concreten con «diálogo y en plazos que sean razonables y colocando atención a los efectos secundarios».
Y, en esta línea, el jefe de la billetera fiscal aseguró que el proyecto de reforma laboral que ya se discute en el Congreso «no quita que sea posible mejorarlo» y respecto a la tributaria también insistió que se encuentran disponibles a perfeccionar su implementación.