Accidentes dramáticos y de extrema gravedad, pero, sin embargo, sigue siendo a la fecha el combustible más económico. Las potencialidades del gas son enormes, pero la carga negativa le afecta de sobre manera.
Los beneficios del gas como medio de combustión están probados, pero así como su valía ya es una constante global en los quehaceres del hogar y sobrepasa por lejos el de otros elementos. Pero todo tiene su lado B y los riesgos que encierra deben ser observados y dimensionados con responsabilidad y prudencia.
Accidentes a raíz del mal manejo
La gran mayoría de los hogares nacionales tienen por combustión principal el gas para sus labores principales. Cocina y calefacción, entregan como primacía al gas. Por lo tanto, los riesgos de accidentes se elevan automáticamente dada su preponderancia. Así lo dejó entrever un riesgoso accidente que ocurrió la semana pasada en la comuna de San Joaquín. Un departamento en un condominio explotó a raíz de una mala instalación de las cañerías de gas.
La explosión dejó 5 departamentos inutilizables y los restantes con daños superficiales. La situación visualmente catastrófica y el estruendo que generó fue enorme en el pequeño condominio. Los vecinos, alarmados exigieron que la empresa se hiciera responsable de una queja que ya llevaba varios meses, y que apuntaba a que ahí se presentaba una fuga de gas.
La utilización del gas en los vehículos particulares y públicos se ha vuelto mucho más recurrente con el paso de los años. Desestimado durante mucho tiempo como combustible para vehículos, el auge que tiene en la actualidad se debe al alza de las bencinas, al rendimiento que entrega al motor y a lo beneficioso que se vuelve al momento de utilizarlo en negocios de vehículos de transporte. Pero aquí los riesgos tampoco están salvados.
Un solo ejemplo acaecido en nuestro país para graficar lo que ha sucedido en varios que han comenzado a priorizar el gas como combustible de automóvil. En Viña del Mar, un conductor de colectivos resultó con el 40% de su cuerpo quemado. El accidente se produjo luego de que el vehículo explotara en una distribuidora de gas natural, inmediatamente después de que el chofer hubiese finalizado una carga de combustible, específicamente, gas licuado.
El combustible sufrió una inflamación y el conductor del automóvil resultó con parte del cuerpo afectado por la temperatura. El hombre accidentado fue trasladado hasta el Hospital Gustavo Fricke.
Un combustible con potencial
Un vehículo particular ahorra el 45% de su gasto si cambia su combustión a la del gas. En palabras de Manuel Correa, gerente de Gas Autos de Colombia, la creencia de los daños al vehículo no es tal. «Los daños en el vehículo, en el motor o en los cilindros no se deben al funcionamiento del gas, sino al mal uso que las personas le dan al vehículo», asegura.
Bernardita Aguirre Pascal, encargada de comunicaciones de AutoGasco, explica el potencial de los vehículos a gas. Primero aclara que «es importante que la autoridad flexibilice la normativa para que esta tecnología pueda ser utilizada por cualquier persona», agrega.
Un elemento que destaca es las nulas prohibiciones de tránsito. «A los beneficios económicos, se suma que los autos convertidos no tienen restricción vehicular y, por lo tanto, los taxistas no dejan de trabajar en esos días. Por lo mismo, mensualmente, 330 vehículos se transforman a gas licuado», asegura.
«El miedo que expresan algunas personas es que el tanque de gas, instalado en la maleta del auto, explote si hay choque. Pero eso es imposible. El tanque es lo más seguro que tiene el auto, tiene un grosor de dos pulgadas y resiste balazos y una caída de una altura de 20 pisos», dice Jorge Schalchli, gerente de la empresa Autogas, dedicada a la conversión de vehículos.
Al testimoniar sobre seguridad del estanque, Schalchli agrega. «Tiene tres sistemas de seguridad que permiten que el flujo de gas se corte si hay algún tipo de fuga o de golpe. Además la tecnología ha avanzado y hay nuevos estanques que se instalan en zonas más seguras, por ejemplo donde va guardado el neumático de repuesto», asevera. Cabe destacar que el diseño del tanque también semeja un neumático.
«El escenario actual, alza en el tipo de cambio, entrega un panorama muy adverso para los combustibles importados en general. Sin embargo, los aumentos absolutos permiten beneficiar aún más el ahorro diario esperado para cada tipo de cliente. En el caso de los taxis colectivos, en el escenario de precios vigente, el ahorro diario es entre $4 mil y $5 mil para el caso del gas licuado petróleo y puede superar los $7 mil diarios en el caso del gas natural comprimido en Santiago y los $13 mil en el caso del gas natural comprimido en Punta Arenas», afirma el gerente comercial de AutoGasco, Rodrigo Araya.
El ejecutivo señala que «otro de los alicientes que ha elevado el número de taxis y colectivos a sumarse al gas es la posibilidad que están dando las empresas de reconvertir de forma gratuita los autos bajo el compromiso de utilizar de manera constante los estanques».