La densa capa de humo que se aprecia en invierno cuando la contaminación hace crisis en Santiago, fue percibida ayer con fuerza en la capital. Esta vez, el esmog que se concentró en la zona sur de la capital no provenía de fuentes industriales o vehículos, sino que de un incendio en el relleno sanitario Santa Marta, en Talagante, el mayor siniestro ocurrido en un acopio basura en el país.
La columna de humo y un fuerte olor a desechos generados por el evento -provocado tras el deslizamiento de basura que hizo emerger gases combustibles-, se percibió en toda la capital, pero afectó, en especial, a San Bernardo, La Florida y Puente Alto. La estación de monitoreo de calidad del aire en esa comuna marcó un índice “regular”, pero a partir de las 16 horas alcanzó un nivel de alerta por la presencia de Material Particulado Fino (MP 2,5). Por la mañana, el intendente de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, descartó la toxicidad del humo, lo que fue mal evaluado en La Moneda y por expertos (ver página 3). El peak en Puente Alto llegó a 233 microgramos por metro cúbico a las 1 de la madrugada, lo que equivale a una “emergencia” ambiental, si hubiera persistido por 24 horas.
El humo impactó a los vecinos. Luz Núñez (73) quien debió atenderse en el consultorio Bernardo Leighton de Puente Alto, dijo que sintió una dura afección a la garganta y nariz. “Tuve un mareo debido al olor y vine a para ver si me pueden dar una mascarilla”, dijo. El alcalde, Germán Codina (RN), aseguró que “es grave que no se haya fiscalizado antes este relleno para evitar este tremendo incendio. Tenemos a personas enfermas por vivir cerca de un basural”.
En San Bernardo también hubo efectos en la salud. Alicia Canto (75) quien acudió al Centro de Salud Familiar, Raúl Brañes, aseguró que desde las primeras horas de ayer sintió “un dolor en el pecho, es desesperante el olor que ahoga, marea”.
La labor de bomberos y del personal de la empresa avanzó lentamente. La intendencia informó que ayer se usaría una espuma para aplacar el siniestro y se dispuso de camiones que lanzaran tierra en el sector con lo que se quería controlar en un 50% el hecho. Sin embargo, se estima que las labores de contención se prolongarán por 24 horas más.
El relleno sanitario Santa Marta es un depósito clave, pues recibe el 31% de los desechos generados en la Región Metropolitana. De hecho, el siniestro provocó una redistribución de la disposición de la basura en la capital por la clausura del acopio.
El intendente Orrego se reunió con las empresas que administran los otros rellenos sanitarios: KDM, en Til-Til y Santiago Poniente, en Maipú. Este último fue el lugar elegido por 14 alcaldes para arrojar sus desechos mientras se prolongue el incendio, por lo que recibirá alrededor de 2.000 toneladas extra por día (que se sumarán a los 2.000 que ya acopia). Se acordó que se mantendrá el mismo precio para disponer la basura, en $ 8.930 cada tonelada. “Tenemos capacidad para recibir residuos, con más personal y más maquinaria”, dijo Elier González, director de Veolia, la firma propietaria. El resto de las municipalidades que trabajaban con Santa Marta llevarán su material a TilTil.
Ayer se anunciaron tres investigaciones para esclarecer lo sucedido. El Ministerio de Salud abrió un sumario sanitario por el mal manejo de la disposición de la basura y la Superintendencia del Medio Ambiente, fiscalizó las instalaciones del relleno ayer.
Las multas a las que se expone la compañía -si se comprueba un ilícito-, van desde la amonestación hasta una sanción económica que puede alcanzar las 10 mil Unidades Tributarias Anuales ($ 5.394millones). La ley también contempla la clausura definitiva y quitarle el permiso para funcionar, como medida extrema. Esta empresa -que comenzó a operar en 2002-, muestra que ha registrado sanciones (ver página 4).
Además, el Ministerio Público inició una indagación penal por el siniestro. La fiscal regional Metropolitana Occidente, Solange Huerta, aseguró que “no se puede descartar que haya tenido algún grado de intencionalidad, que, eventualmente, haya sido culposo o bien que se compruebe que no hay responsabilidad penal”. El fiscal jefe de flagrancia, Luis Pablo Cortés, tomó las primeras diligencias. Al lugar acudió un equipo de la Brigada de Investigación de Delitos Medioambientales del PDI, el cual entrevistó al personal de la firma. Otra línea que se analiza está relacionada con las altas temperaturas.
El consorcio Santa Marta, a través de un comunicado, informó que estaban trabajando “coordinadamente con bomberos, entregando en todo momento recursos humanos, maquinaria y material necesario para lograr controlar el foco de fuego que estimamos a la media noche disminuya en un 50%”. También descartaron que haya daño en la capa ubicada entre los desechos y la tierra (geomembrana) que evita el escurrimiento de líquidos percolados hacia las napas.
El Ministerio de Salud activó una alerta en los hospitales y la red primaria para atender a eventuales afectados por enfermedades respiratorias, tal como sucede en invierno.
Fuente: La Tercera